En el mundo de los mutantes, el poder se mide en escalas y en la cima de todas ellas está el nivel Omega: mutantes cuyo potencial no tiene límites. Pero… ¿qué ocurre cuando aparece alguien tan peligroso, tan inconcebiblemente poderoso, que esa clasificación ya no alcanza para describirlo?
Tanto en la tierra principal como en otras realidades del extenso multiverso Marvel existen casos excepcionales de mutantes tan absurdamente poderosos que han sido descritos, explícita o implícitamente, como más allá del nivel Omega.
¿Qué significa esto? Básicamente, son personajes cuyas capacidades superan incluso a los Omega estándar, imagínense que tan poderosos pueden ser. ¡Prepárate para conocer a los mutantes que superan el nivel Omega!
Nate Grey (X-Man)
Nathaniel Grey, alias X-Man, es una versión alterna de Nathaniel Summers (Cable), proveniente de la línea temporal de la Era de Apocalipsis. Nate Grey no nació de forma natural. Fue el resultado de uno de los experimentos más ambiciosos y peligrosos de Mister Sinister. Usando el material genético de Jean Grey y Scott Summers, Siniestro creó al mutante más poderoso de su mundo. Su plan era moldearlo como un arma para derrocar a Apocalypse.
En el laboratorio de Sinister, fue Cíclope, su padre genético, sin saberlo, quien lo liberó. Nate acabó bajo la tutela de Forge y un grupo de mutantes marginados, experimentando de primera mano los horrores del régimen de Apocalipsis… y juró detenerlo.
En este universo fuimos testigos de las verdaderas habilidades de X-Man. Sus poderes psiónicos no tenían freno: telepatía y telequinesis a niveles que rozaban lo divino. Estamos hablando de manipular materia y energía a escala cósmica, abrir agujeros de gusano, viajar entre universos, fusionarse con versiones alternativas de sí mismo, e incluso alterar la realidad.
En el plano mental, Nate podía contactar con cualquier ser… estuviera en otro planeta, en otro universo o incluso muerto. Conversar con entidades de planos superiores, percibir el pasado y el futuro, bloquear poderes de otros mutantes, volverse intangible o invisible, manipular sueños y hasta crear dimensiones de bolsillo.
Una de las hazañas más importantes de X-Man, fue crear su propio universo, una utopía mutante, denominada la Era de X-Man. Al descubrir que estaba muriendo, debido a que Norman Osborn y sus X-Men Oscuros lo secuestraron en una Máquina Omega, extrayendo gran parte de su poder, y, temeroso que la Tierra-616, en su ausencia, se convierta en una nueva Era de Apocalipsis, Nate Grey utilizó una Semilla de Vida, un objeto celestial que ayuda a una forma de vida a explotar su potencial completo, para recuperar y desencadenar todo su poder oculto.
Potenciado por la Semilla de Vida, no dudó en eliminar a quienes se opusieron a la creación de su nuevo mundo. Enfrentado a los X-Men y Legión, logró controlar la mente y el cuerpo de este último, atrapó a Jean Grey en su mente y finalmente hizo desaparecer a todos los X-Men presentes.
En realidad, Nate los había trasladado a una realidad creada por él: la Era de X-Man, una supuesta utopía mutante sin conflictos ni relaciones románticas. Alteró recuerdos, eliminó relaciones y mantuvo a todos bajo su control mental. Sin embargo, grietas en la realidad y actos de rebeldía revelaron las fallas de su plan. Tras ser confrontado, incluso por una proyección de su exnovia Dani Moonstar, aceptó su error, devolvió a todos a la Tierra-616 y decidió reconstruir su utopía con la ayuda del Magneto de esa realidad.
Matthew Malloy
Tras sufrir la muerte de su novia durante la invasión Skrull, los genes mutantes de Matthew Malloy se activaron de forma catastrófica. ¿Qué tan catastrófica? Para resumir: Cerebro detectó su aparición como la firma de poder mutante más grande jamás registrada. Hank McCoy confirmó atónito que estaba “por encima de un mutante Omega”.
El poder mutante de Malloy le permitía recurrir a una fuente de poder extradimensional capaz de deformar la realidad a su voluntad. Se le describió teniendo el poder de un dios, con poder sobre la vida y la muerte, el tiempo y el espacio.
Entre sus habilidades destacan telequinesis y telepatía avanzadas, generación y manipulación de energía, control absoluto de la materia, teletransportación, desintegrar a otros sin esfuerzo, resurrección y manipulación total del espacio-tiempo. El nivel de sus poderes aumentaba con sus emociones, haciendo de él una bomba viviente de potencial ilimitado.
En su breve aparición, Malloy eliminó accidentalmente a Emma Frost, y a otros varios mutantes, sin mucho esfuerzo. Resucitó después de ser alcanzado por un bombardeo aéreo, que cobró la muerte de Cyclops y Magik, y, destruyó escuadrones enteros de S.H.I.E.L.D. con solo el movimiento de sus manos.
Un testamento, tras la muerte del Profesor X, a manos de un Cyclops influenciado por la fuerza Fénix, reveló que llevaba años vigilándolo porque, a pesar de que había desactivado psíquicamente sus poderes, Matthew era inestable y si su poder se manifestaba, podría desestabilizar el mundo cayendo en manos equivocadas o peor, cayendo en manos de nadie.
Finalmente, la mutante Tempus retrocedió en el tiempo y, acompañada de un Charles Xavier del pasado, evitaron el nacimiento de Malloy, impidiendo que sus padres se conocieran.
Marqués de la Muerte
Su nombre real es Clyde Wyncham, pero todos lo conocen como el Marqués de la Muerte, el mismísimo maestro del Doctor Doom.
Clyde era el único mutante de su mundo, una realidad muy similar a la nuestra, dónde los superhéroes y sus villanos solo existen en los cómics. En 1985, tras una crisis mental, causó una calamidad interdimensional que sacudió tanto su realidad natal como la de Tierra-616, el universo principal de Marvel.
Clyde hizo que los supervillanos de los cómics de Marvel aparezcan en su propia realidad, desatando caos y una gran cantidad de muertes. Afortunadamente, los villanos fueron detenidos cuando los superhéroes de Marvel aparecieron gracias a la intervención de Toby, el hijo pequeño de su amigo de la infancia Jerry.
Clyde fue detenido y traslado a Tierra-616 con el resto de los personajes de cómic. Posteriormente, Reed Richards lo colocó en una celda en el Área-87 y creó un casco cibernético para darle a Wyncham una eternidad de sueños placenteros. Sus habilidades divinas para alterar la realidad fueron sometidas por su propio daño cerebral interno.
Años después, el Área-87 cayó bajo el ataque de varios de los mayores enemigos de Reed Richards. En su pelea, despertaron a Clyde y accidentalmente restauraron su mente. Con solo pensarlo, Clyde mató a todos los villanos y, al hacerlo… despertó su insaciable hambre de destrucción. Convirtiéndose en el Marqués de la Muerte.
Durante mil millones de años perfeccionó el dominio absoluto del tiempo y el espacio. Viajó por el Multiverso, aprendiendo acerca de dimensiones, magia, ciencia, tecnología y realidades alternas, extinguiendo universos enteros como si fueran velas en una noche sin luna.
En una de esas travesías, llegó a la Tierra-616 y allí encontró a un joven Victor Von Doom. Reconociendo en él un diamante en bruto, se convirtió en su maestro, enseñándole todos sus secretos, esperando que un día, cuando él regrese, Doom haya sometido cruelmente su mundo.
Veinte años después de terminar su entrenamiento, el Marqués volvió a la Tierra. Al ver que el Doctor Doom había fracasado en su misión, su maestro y su nuevo aprendiz, humillaron cruelmente al gobernante de Latveria.
Lo sometió a ilusiones tan perfectas que Doom llegó a creer que había logrado su mundo ideal: una Tierra en paz, una Edad de Oro, y casado con la mismísima Susan Storm. Pero fue una cruel trampa. Apenas habían pasado unos segundos. El Marqués le arrebató todo de golpe, destruyó Latveria, y lo arrojó moribundo a un océano prehistórico… directo a la boca de un megalodón.
Con Doom fuera del tablero, el Marqués y su nuevo Aprendiz, volvieron su mirada hacia los Cuatro Fantásticos, torturándolos física y emocionalmente: el Marqués obligó a Ben Grimm a presenciar la muerte de su querida tía Petunia, y a Johnny Storm a ver incontables versiones de su hermana asesinadas por sus manos. Incluso puso a Reed Richards frente a un dilema: matar a su propio hijo Franklin… o a su mejor amigo Ben Grimm. Reed, fiel a sus principios, se negó.
Los Cuatro Fantásticos no eran rivales para el Marqués de la Muerte. Sin opciones, trajeron incluso a un joven Clyde Wyncham para que peleara contra el Marqués. Fue un combate de proporciones cósmicas, que terminó con la victoria del Marqués.
Sin embargo, quedó muy debilitado, y esto fue aprovechado por su nuevo aprendiz. Su nuevo pupilo no era otro que Victor Von Doom, que, a pesar de ser despedazado por megalodontes en el alba del tiempo, fue su odio que lo mantuvo vivo todo ese tiempo. Pasó millones de años dominando las Artes Negras, así como muchas otras habilidades divinas, transformando su cuerpo hasta que ni siquiera quedó una molécula que pudiera revelar su identidad al Marqués cuando se convirtió en su nuevo aprendiz, completando su educación y, preparando el terreno para cuando llegue el día en que finalmente pudiera vengarse él.
Doom, sin ceremonias, lo eliminó. Así acababa uno de los mutantes más peligrosos que jamás haya existido.
El Marqués de la Muerte era un mutante cósmicamente poderoso a escala multiversal. Capaz de viajar entre universos paralelos, destruir sin esfuerzo casi todo, incluidas realidades enteras, e incluso usar o crear entidades abstractas o de dimensiones. En la pelea con su versión más joven, Clyde Wyncham, se ve cómo ambos invocan héroes, monstruos, dioses y entidades cósmicas para combatir en su nombre.
Mad Jim Jaspers
Hablar de Mad Jim Jaspers es hablar de uno de los mutantes más peligrosos y temidos de todo el multiverso Marvel. Su poder es tan vasto que incluso va más allá de la clasificación omega: la capacidad de alterar la realidad a voluntad, reescribiendo materia, energía, espacio e incluso las leyes de la física como si fueran simples juguetes.
Su primera gran aparición fue en Tierra-238, donde Jaspers, un político británico, convenció al pueblo de exterminar a los superhumanos y creó a La Furia, una máquina imparable programada para destruir héroes. El resultado fue la aniquilación total de los superhumanos de ese mundo. Cuando se reveló que él mismo era un mutante con el poder de deformar la realidad, su locura desató tal nivel de caos que la única solución fue borrar esa realidad completa del multiverso.
Pero esa no fue su versión más peligrosa. En Tierra-616, Jaspers alcanzó un nivel todavía mayor. Convirtió Gran Bretaña en un estado totalitario y sumió al mundo en un desorden temporal y físico absoluto: días y años se confundían, las leyes de la naturaleza colapsaban y las personas eran transformadas grotescamente a su antojo.
El Capitán Britania se enfrentó a él, pero no fue quien lo detuvo. La respuesta vino de su propia creación: La Furia, que logró arrastrarlo fuera del universo, a un lugar sin realidad que manipular. Aun así, Jaspers regresó una y otra vez, ya fuera como fiscal en el juicio de Magneto, como una entidad fusionada con La Furia durante House of M, o como un comerciante en el Mercado Corrupto de Otromundo durante la era de Krakoa.
En su máximo esplendor, Jaspers ha demostrado poderes inconcebibles: Alterar universos completos. Reconstruir su cuerpo tras la destrucción. Crear vida sensible de la nada. Convertirse en gigantes o en objetos inanimados. Retorcer la mente y la carne de sus víctimas como si fueran plastilina.
Miranda
Los poderes de Miranda trascienden lo que se entiende por un mutante de nivel Omega; ella puede reescribir la realidad misma, manipular la continuidad del mundo y alterar la historia como si fuera una página de un cómic.
Con un simple pensamiento puede borrar personas de la existencia y, peor aún, eliminar todo rastro de su memoria en la mente de los demás. Un instante después, puede devolverlas, como si nada hubiera ocurrido. Ella misma admitió haber rehecho la historia de su mundo varias veces, moldeándola a su gusto. Y lo más perturbador: es plenamente consciente de que es un personaje ficticio y utiliza esa consciencia para editar la narrativa que la rodea.
Su primera aparición fue durante un evento mutante organizado por el Instituto Xavier, donde conoció a Bailey Hoskins —un mutante con el trágico poder de explotar una sola vez, a costa de su vida—. Para demostrar su don, Miranda hizo desaparecer a toda la multitud presente… y, segundos después, los devolvió, como si jamás hubiera sucedido. Aquello dejó claro que estaba operando a una escala más allá de lo imaginable. Hank McCoy, tras analizarla, acuñó un nuevo término solo para ella: mutante nivel ómicron.
Miranda se unió a Bailey y a otros jóvenes mutantes como Riches (capaz de convertir cualquier cosa en oro) y Rags (que degradaba objetos psíquicamente), enfrentando amenazas como los Brood y Juggernaut. Pero la aparente camaradería terminó en tragedia: Riches asesinó a Charles Xavier y tomó el control de la comunidad mutante. Ante este nuevo orden, Miranda se retiró “a las ideas puras del espacio”, incrementando su ya inquietante sentido de omnipotencia.
Años después, en una cena conmemorativa del triunfo de Riches, Miranda reapareció para revelarle a Bailey el verdadero alcance de su poder: ella era la fuente invisible de todos los reinicios del Universo Marvel. Era la mano que mantenía a los héroes eternamente jóvenes, la responsable de que los X-Men de los 60 siguieran luchando en 2016, el artífice del regreso de Bucky Barnes como el Soldado de Invierno, y de incontables cambios “espontáneos” en la historia. Miranda era, en esencia, la personificación viviente del retcon.
Pero incluso con tal poder, Miranda no alteraba directamente la injusticia del mundo. “La historia debe avanzar”, explicaba, como si respondiera a un guion invisible. Indignado, Bailey decidió actuar. Enfrentó a Riches y, por primera y única vez, usó su don suicida, sacrificándose para abrir el camino a que Miranda reescribiera todo.
En ese instante, Miranda borró de la existencia ese futuro… y con él, la historia misma de Bailey. En el plano “real”, el cómic que narraba su vida jamás fue publicado.
Hyperstorm
Hyperstorm, cuyo verdadero nombre es 𝐉𝐨𝐧𝐚𝐭𝐡𝐚𝐧 𝐑𝐢𝐜𝐡𝐚𝐫𝐝𝐬, es el hijo de 𝐅𝐫𝐚𝐧𝐤𝐥𝐢𝐧 𝐑𝐢𝐜𝐡𝐚𝐫𝐝𝐬 𝐲 𝐑𝐚𝐜𝐡𝐞𝐥 𝐒𝐮𝐦𝐦𝐞𝐫𝐬 en Tierra-967, una variante del mundo de Días del Futuro Pasado. En esta línea temporal, Franklin y Rachel formaron una pareja y tuvieron un hijo, algo que no ocurrió en la versión original.
El mundo en el que nació Jonathan era una desgracia. Los centinelas habían exterminado a casi toda la población superheroica y mutante. Desde niño, juró reclamar su mundo, ignorando todas las cosas heroicas que su padre le contaba sobre los 4 Fantásticos.
Con habilidades obtenidas del Hiperespacio que le permitían manipular la materia, el espacio, el tiempo y la mente, 𝐜𝐨𝐧𝐪𝐮𝐢𝐬𝐭𝐨́ 𝐥𝐚 𝐓𝐢𝐞𝐫𝐫𝐚 𝐩𝐨𝐬𝐭-𝐚𝐩𝐨𝐜𝐚𝐥𝐢́𝐩𝐭𝐢𝐜𝐚 𝐲 𝐭𝐨𝐝𝐨𝐬 𝐥𝐨𝐬 𝐦𝐮𝐧𝐝𝐨𝐬 𝐡𝐚𝐛𝐢𝐭𝐚𝐝𝐨𝐬.
𝐇𝐲𝐩𝐞𝐫𝐬𝐭𝐨𝐫𝐦 logró conquistar y dominar completamente su realidad antes de fijar su mirada en el universo 616, donde decidió intervenir en la vida de los Richards.
En términos de poder, Hyperstorm es uno de los mutantes más aterradores jamás conocidos. Está vinculado a una fuente de energía infinita llamada 𝐇𝐲𝐩𝐞𝐫𝐬𝐩𝐚𝐜𝐞 (hiperespacio), lo que le permite controlar las cuatro fuerzas fundamentales del universo, además de poseer habilidades psíquicas de un nivel excepcional.
Tras una batalla entre Doom y Reed Richards, los interceptó a ambos en su nave, torturó a Doom por meses y, envió a Reed Richards a atrás en el tiempo, en una época donde la civilización apenas estaba desarrollándose.
Ni siquiera después de ser rescatados por Namor, Sue Storm, Ben Grimm, Johnny Storm y Lyja, y uniéndose a la batalla, pudieron estar a la altura. Ni siquiera la intervención del viajero temporal 𝐍𝐚𝐭𝐡𝐚𝐧𝐢𝐞𝐥 𝐑𝐢𝐜𝐡𝐚𝐫𝐝𝐬, padre de Reed, pudo ayudar.
El verdadero giro llegó cuando Reed Richards logró liberar a Galactus de un exilio dimensional. Hambriento tras su “resurrección”, el Devorador de Mundos vio en Hyperstorm una fuente de poder ideal… y ambos chocaron en una batalla cósmica que terminó con los dos arrastrados de nuevo al vacío dimensional.
Al ser hijo de Franklin y Rachel, 𝐇𝐲𝐩𝐞𝐫𝐬𝐭𝐨𝐫𝐦 𝐞𝐬 𝐮𝐧 𝐦𝐮𝐭𝐚𝐧𝐭𝐞 𝐝𝐞 𝐩𝐨𝐝𝐞𝐫 𝐢𝐧𝐦𝐞𝐧𝐬𝐮𝐫𝐚𝐛𝐥𝐞, con las siguientes habilidades: Control de las cuatro fuerzas fundamentales del universo (manipulación de la materia, gravedad, energía y más), teletransportación a través del hiperespacio, invisibilidad y camuflaje telepático, telepatía, control mental y creación de ilusiones, telequinesis a escala masiva, proyección astral, regeneración acelerada y poder psiónico prácticamente infinito.
Santa Claus
En una Nochebuena, los 𝐗-𝐌𝐞𝐧 disfrutaban de una tranquila velada cuando, de pronto, 𝐂𝐞𝐫𝐞𝐛𝐫𝐨, la máquina capaz de detectar mutantes comenzó a emitir alertas como nunca antes. Según sus registros, 𝐚𝐜𝐚𝐛𝐚𝐛𝐚 𝐝𝐞 𝐥𝐨𝐜𝐚𝐥𝐢𝐳𝐚𝐫… ¡𝐚𝐥 𝐦𝐮𝐭𝐚𝐧𝐭𝐞 𝐦𝐚́𝐬 𝐩𝐨𝐝𝐞𝐫𝐨𝐬𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚!
Siguiendo la señal, los X-Men llegaron al 𝐂𝐞𝐧𝐭𝐫𝐨 𝐑𝐨𝐜𝐤𝐞𝐟𝐞𝐥𝐥𝐞𝐫, justo en medio de las celebraciones navideñas. Pero no estaban solos: la Hermandad de Mutantes Malvados también había aparecido, causando caos y destrozos. Entre la multitud, un hombre vestido de Santa Claus parecía ajeno a la pelea… hasta que todo cambió.
No era un hombre chambeando como Papá Noel, ¡era el verdadero Santa Claus! y con un simple gesto de su mano, 𝐭𝐫𝐚𝐧𝐬𝐟𝐨𝐫𝐦𝐨́ 𝐚 𝐥𝐚 𝐇𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐝𝐚𝐝 𝐞𝐧 𝐣𝐮𝐠𝐮𝐞𝐭𝐞𝐬, para luego devolverlos a la normalidad. En segundos, había controlado la situación con una facilidad pasmosa.
Pero la cosa no terminó ahí: antes de marcharse, 𝐍𝐨𝐞𝐥 𝐛𝐨𝐫𝐫𝐨́ 𝐥𝐚 𝐦𝐞𝐦𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐭𝐚𝐧𝐭𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐨𝐬 𝐗-𝐌𝐞𝐧 𝐜𝐨𝐦𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐇𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐝𝐚𝐝, 𝐲 𝐭𝐞𝐥𝐞𝐭𝐫𝐚𝐧𝐬𝐩𝐨𝐫𝐭𝐨́ 𝐚 𝐥𝐨𝐬 𝐩𝐫𝐨𝐭𝐞𝐠𝐢𝐝𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐗𝐚𝐯𝐢𝐞𝐫 𝐚 𝐥𝐚 𝐦𝐚𝐧𝐬𝐢𝐨́𝐧 𝐗, dejando que la Navidad siguiera su curso como si nada hubiera pasado.
En esta breve aparición, distinguimos los siguientes poderes de santa claus: Alteración de la realidad, teletransportación, poderes psiónicos masivos, alteración molecular, capacidad de detectar quién ha sido bueno o malo y crear nevadas en todo el mundo.
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Y ahora te pregunto: ¿cuál de estos mutantes crees que es realmente el más peligroso? Te leo en los comentarios.
